Parapoliciales del palo

Pensé que se trataba de cieguitos.

Va el séptimo integrante de una familia venezolana que es asesinado por los Falcon Verde del régimen chavista.

Juan José Barrios, de 28 años, se convirtió en el séptimo hijo de la familia en ser asesinado desde 1998, cuando comenzaron a denunciar abusos policiales en Guanayén, un pequeño pueblo de Aragua, en el centro – norte del país.

Todas las ejecuciones se produjeron ante la inacción del gobierno chavista, pese a que la Corte Interamericana de Derechos Humanos, dependiente de la OEA, emitió cuatro medidas cautelares que pedían expresamente proteger a la familia. [...]

La pavorosa historia de la familia Barrios comenzó en 1998, cuando Benito Barrios, duaño de un bar en esa localidad venezolana, pidió a los policías que iban a beber a su local, que pagaran lo que consumían. Días después, apareció ultimado de varios balazos y con signos de haber sido torturado.

En diciembre de 2003, varios agentes dejaron sin vida a Narciso Barrios, de 22 años. Luego ultimaron a Luis Alberto, en 2004; a Rigoberto, en 2005; a Oscar, en 2009, y a Wilmer, el año pasado. Todos ellos fueron sacados de sus casas por la fuerza, supuestamente en vehículos de la policía regional.

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Entrevistado al respecto Eduardo Aliverti, sostuvo que "la prensa no cuenta toda la verdad, es evidente que algo habrían hecho" y que "la revolución que soñamos para Latinoamérica es mas importante que estas distracciones plantadas por los medios hegemónicos".

Por otra parte, Hebe de Bonafini opinó que "esto es parte de una campaña para desprestigiar la maravillosa obra que está haciendo el Comandante Chavez", y que "la Presidenta se ha comunicado hoy con el Comandante para expresarle su apoyo ante este ataque de los medios".
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