Si toda medida desacertada y aún los mamarrachos económicos derivaran en procesos penales, la mayoría de nuestros gobernantes debería desfilar por los tribunales, y los jueces –que habitualmente desconocen la economía- se convertirían en evaluadores del acierto o conveniencia de las políticas económicas, a través de un uso antojadizo, selectivo y persecutorio del derecho penal.
By the way, el plazo máximo de prescripción de la pena para los delitos reprimidos con prisión perpetua es de 15 años (artículo 62, inciso 1° del Código Penal). El solo hecho de abrir una investigación por hechos sucedidos hace 29 años nos muestra lo peligroso que es en Argentina enfrentarse al poder.
Agrego: los procesos contra De la Rúa, Menem y el resto se inspiran en gran medida en la "izquierda carcelera" (CELS y compañía). El mensaje claro es: para los "neoliberales" -incluyendo en el concepto a todos los que ellos quieran incluir- ni justicia.
Julio
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