Nov 19, 2011

Recibido por mail

Vayuno a saber si es realmente así. Relacionado con las tablas que colgó Rothbard hace unos días. Sirve para darse una idea de la oportunidad única que están tirando a la basura con tal de darse con todos los gustos populistas:

No me cabe duda que los historiadores del futuro se mostrarán asombrados por la evolución de la integración de Argentina con el mundo, materializada por medio de un explosivo aumento de sus exportaciones, a partir de 1989. Es que en el año 1988 el país exportó tan solo por un total de 6380 millones de dólares. A partir de entonces en un proceso gradual e incesante superaremos probablemente en 2011 los 70.000 millones de dólares, un aumento solo similar en proporción a la época del primer Centenario. Lo que ocurrió hace un siglo está bastante claro: fundamentalmente la fenomenal expansión de la frontera agrícola a partir de 1899. ¿Y ahora que pasó? Le solicité a un gran amigo, un académico reconocido y profundamente conocedor del sector agrícola, que me dieran cifras y me explicara su visión del "milagro argentino" en esa materia. Estos son los datos que me suministró y sus opiniones:

Mi amigo agrega los siguientes comentarios:

1) Como se ve y al igual que 110 años atrás nuevamente estamos frente a una brusca expansión de la frontera agrícola: las hectáreas cultivadas con cereales se triplicaron en 20 años. Las razones serían:

a) La Argentina logró desarrollar a partir de los 90 un formidable paquete tecnológico que permitió incorporar tierras consideradas no o muy poco aptas para la agricultura. Ese paquete, que pone a la Argentina entre los países a la cabeza del mundo en materia de productividad, incluye la siembra directa, el uso de semillas genéticamente modificadas, la aplicación sistemática de fertilizantes y agroquímicos adecuados, el uso y desarrollo de maquinaria agrícola de última generación, y una óptima relación entre productores y el sistema profesional y técnico que los asesora.

b) Los precios de los cereales a partir del 2003 fueron un incentivo poderosísimo, que a veces generó incluso desmontes depredatorios. A ello se agregó un cambio en el régimen de lluvias en el norte del país favorable a la agricultura. A todo esto se sumó una extraña política con respecto a la carne vacuna que unida a otras circunstancias incitó a productores tradicionalmente ganaderos a abandonar la esa ocupación (el rodeo vacuno cayó en un 25%) en beneficio de la actividad agrícola.

c) Se puso a punto en Argentina un régimen de contratación y arrendamientos extremadamente eficiente que posibilita sacar máximo provecho de economías de escala con importante aumento de la rentabilidad.

d) Durante los 90 aumentó notablemente la capacidad de almacenaje y por sobre todo la privatización y consiguiente modernización de los puertos y paralelamente la construcción de la hidrovía fueron fundamentales para posibilitar la exportación tan rápidamente creciente. Pero fue además durante esos años que se consolidó en torno a Rosario una industria aceitera que hoy se considera la más moderna del mundo.

2) Pero además como puede verse de los valores mas arriba el aumento de precios fue fenomenal en la última década, triplicando o cuadruplicando los valores de 2001. La explicación es la demanda incontenible de los países emergentes. China por ejemplo creció, para centenares de millones de sus habitantes, de un consumo anual de 7 kg de carne por habitante a uno de 55. Y cada uno de esos kilos implica un kg. de soja y dos de maíz. Durante todos estos años su producción de soja fue de 15 millones de toneladas. En 1995 no importaban un kilo, hoy importan más de 50 millones de toneladas. China es un gran productor y hasta hace tres años exportador de maíz, hoy ya importa 7 millones de toneladas. Por ello, pese a avatares circunstanciales, puede pensarse que la actual tendencia de precios puede sostenerse en el tiempo.

Por último me informa que un campo en Pergamino que en 1988 valía en promedio 1457 u$s la hectárea, pasó a valer 3950 en el 2000 y hay está en torno a los 15.000. Dato muy elocuente.

1 comment:

  1. Supongo que esta es la medida de las naciones, qué hacen cuando las cosas salen bien, cómo las siguen, está claro que nosotros decidimos comernos todo.

    La Argentina es la cigarra, la hormiga nunca llega lejos.

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