Se los pregunto porque aparentemente muchos no terminan de entender que legitimar el robo implica lisa y llanamente la ley del más fuerte, la de la selva, aquello de que el pescado más grande se come al más chico.
Si no sos el más fuerte - lo que antes pasaba por lo físico y ahora por quién tiene más y mejores armas -, te conviene toda la vida vivir en un sistema en base al estado de derecho, en el que robar está mal.
Después de la confiscación de YPF y de defecárseles de hilaridad a sus legítimos dueños, ¿con qué cara van a seguir protestando ante el RU por el “robo” de Malvinas o acusando al país que esté de moda de robarse Nuestras Riquezas™?
Están escupiendo al cielo, haciendo pipí contra el viento, haciendo popó sin bajarse los calzones y aparentemente no se dan cuenta.
¿Qué parte no se entiende, Louis?:
ReplyDeleteRobar está bien cuando es uno el que le roba al otro. Cuando el otro le roba a uno, o le exige el pago por el bien o el servicio que le da -es lo mismo-, está mal.
Es "El Evangelio Argento":
Robarás al prójimo como no permitirás que te robe a ti. Pero más o menos." (Un poco de relativismo inmoral no puede faltar.)
Está claro que lo único que va a quedar el día que esta gente se vaya, expulsada por los mismos que hoy los vitorean, van a ser deudas. Todo arderá en la hoguera del populismo. Y esto ya pasó, en 1989. Mientras tengan recursos de los que apropiarse y repartir, seguirán en el poder, pues es lo único que este pueblo crudo e ignorante es capaz de ver. Este proceso ya no se puede detener. Veremos si podremos aprender algo del desastre en ciernes.
ReplyDeleteEl argento se auto-convencerá (o se dejará convencer) de que esto no es un robo, sino una recuperación de lo que previamente sí había sido robado y de que hacía falta alguien con coraje para que fuera a la casa del malo del barrio y recuperara sus bienes a lo guapo. Una especie de Chapulín Colorado.
ReplyDeleteSi todo lo demás falla, no caerá más abajo de considerar que ahora tiene "cien años de perdón".
Diego, pero ojo que lo de "100 años de perdón” como justificativo se puede aplicar también a los argentinos. A no lloriquear amariconadamente después.
DeleteLouis, este es el pueblo que celebra el gol de Maradona a los ingleses! (y me estoy refiriendo al primero). Este hecho por sí solo te explica todo lo demás.
Delete"Las especies condenadas a 100 años de peronismo, no tienen una segunda oportunidad sobre la tierra", García Márquez traducido al argentino.
ReplyDeleteEl argentino promedio está convencido que el mundo necesita de la argentina y la argentina no necesita del mundo por lo que toda avivada nos va a ser perdonada.
ReplyDeleteLa debil respuesta del mundo a nuestro default es la madre de esta expropiación.
Los españoles son victimas de sus buenos oficios para que no nos sacaran del mundo y sus inversiones no se fueran al carajo.
Buen razonamiento, Blas. El default fue casi premiado, era lógico que fueran por más y que la gente razonara que podemos salirnos con la nuestra con cualquier cosa.
ReplyDeleteLa Argentina, por lo menos, se ha librado del cáncer del crédito público externo, porque ya no existe.
Pero todavía queda la inflación, las confiscaciones, las retenciones, etc., queda mucho por quemar en la hoguera del populismo.
Cuando Néstor K. hizo ingresar a Eskenazi (posible testaferro) sin poner un dólar, a pagar con las utilidades. En esa misma época Repsol estaba levantando su "negocio" de la Argentina. Todo este supuesto embrollo estaba pactado de antemano. Ganadores: Repsol y los KK. Perdedores: El pueblo argentino.
ReplyDeleteClaudio.
¿Y en donde está el “negocio” Anonymus? En donde se te paga 45 u$s por metro cúbico extraído (porque el gobierno así lo quiso) o en donde se te pagan 105 $ el m3 ?
Delete¡Cómo para quedarse! ¿Qué harías vos como empresario?
¿Tanto cuesta entender que los únicos culpables de todo esto son los Kirchner?
Luis N, por favor lee o releé algunos posts anteriores.
DeleteY creo coincidirás que el gran y único culpable es el pueblo argentino. Atávico, mazorquero y de una pobreza espiritual vergonzante.
Battle tenía razón, pero no solo en calificar de esa manera "desde el primero al útimo. En esa entrevista también dijo algo muy claro y tan cierto y terrible como aquello que trascendió.
"En la Argentina se habla un lenguaje que en el mundo hace mucho tiempo se extinguió".