Que una de las primeras sociedades del subcontinente en adoptar la modernidad se haya convertido en uno de los principales reductos de la antimodernidad:
En verdad, los males que padece ese gran país que fue Argentina —el más próspero y el más culto del continente desde fines del siglo XIX hasta mediados del XX— no se deben a la prensa libre y crítica, ni al colonialismo británico, ni a las empresas extranjeras que trajeron sus capitales y su tecnología al país creyendo ingenuamente que éste respetaría la legalidad y cumpliría con los contratos que firmaba su gobierno, sino al peronismo, que, con su confusa ideología donde se mezclan las más contradictorias aportaciones, el nacionalismo, el marxismo, el fascismo, el populismo, el caudillismo, y prácticamente todos los ismos que han hecho de América Latina el continente pobre y atrasado que es. Hay un misterio, para mí indescifrable, en la lealtad de una porción considerable del pueblo argentino hacia una fuerza política que, a lo largo de todas las veces que ha ocupado el poder, ha ido empobreciendo al país, malgastando sus enormes riquezas con políticas demagógicas, azuzando sus divisiones y enconos, destruyendo los altísimos logros que había alcanzado en los campos de la educación y la cultura, y retrocediéndolo a unos niveles de subdesarrollo que había dejado atrás antes que ningún otro país latinoamericano. No se necesita tener dotes de profeta para saber que la expropiación de Repsol va a acelerar esta lamentable decadencia.
La modernidad es como una fiesta: el primero en llegar, es el primero en cansarse y el primero en querer irse...
ReplyDeleteLa foto me hace acordar a esta canción:
ReplyDeletehttp://www.youtube.com/watch?v=YzgKUCYVhl0