May 24, 2012

Las prohibiciones de las bolsas de plástico

Para colmo, los países como Argentina que creen que existen atajos para el desarrollo tienden a copiar estos disparates.

Insisto, la ingeniería social es siempre una idea muy peligrosa. Pero practicarla en base a modas pasajeras (o pasajeras sin "sa") es directamente una receta para el desastre:

But the real crisis—the one that rarely gets discussed—is that these types of bans require another public acceptance of total government intrusion into our lives. Is it a legitimate role of government to prohibit one individual from giving a free bag to another individual on the pretext of a supposed societal benefit that does not withstand even friendly scrutiny? Doesn’t every human interaction, no matter how small, have some arguable effect on society? And if so, what’s to prevent those who seek to dictate how everyone lives from invoking that argument at every turn?

13 comments:

  1. Una nota de 2006 me viene a la mente aplicable a todas estas invasiones estatales que están sucediendo en todo Occidente y acabando con él, "La Rule of Law adulterada":

    http://www.juandemariana.org/comentario/934/rule/of/law/adulterada/

    Gus VF

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  2. El Mediterráneo está invadido de medusas de todos los tipos y colores que pican que da miedo e, incluso, están llegando medusas que pueden matar a un humano.

    Parte de la explicación de esta superpoblación de medusas está en la sobrepesca de tortugas marinas, depredadoras naturales de las medusas, y también en que las tontas tortugas se morfan bolsas de plástico porque creen que son medusas (las tortugas lo creen, las bolsas no piensan ni creen en nada). El caso es que estás nadando en una cala de Mallorca o de Ibiza y, de pronto, sentís que se te prende fuego un brazo, una pierna o la jeta misma y es por causa de las jodidas medusas. Lo mismo ocurre en Grecia, Sicilia y donde se te ocurra bañarte en el puto mar lleno de aguavivas.

    Para colmo, las medusas se están cargando los huevos y pececillos de especies de las que se alimentan los humanos y cada medusa que sacás del agua (como hicieron los japoneses con redes para exterminar las aguavivas) al contacto con el aire larga millones de huevos para preservar su especie. Al notar este fenómeno los japoneses suspendieron inmediatamente la pesca de medusas ya que por cada medusa pescada se producían millones más.

    Mi comentario parece medio tirado de los pelos y a contramano de la defensa de la libertad individual que hacemos siempre, pero la libertad exige responsabilidad en su ejercicio y no afectar los derechos de los demás. Y la contaminación del plástico afecta mis derechos y los de todos los demás humanos.

    Las bolsas de plástico (en cualquiera de sus variedades) y los envases plásticos contaminan el suelo y el mar SIEMPRE. No lo digo porque lo digan los "verdes" ni los ambientalistas fanáticos sino porque lo he comprobado y visto por mí mismo. Cuando vivía en Venezuela, los fines de semana buceaba en el Parque Nacional de Morrocoy entre corales espectaculares llenos de botellas de 2 litros de Pepsi (tomaban más Pecsi que Coca Cola los venezolanos), vasos de plástico y latas de cerveza Polar.

    Con otros buzos argentinos amantes del mar también, bajábamos con bolsas de residuos y nos pasábamos todo el tiempo de inmersión sacando las malditas botellas y vasos y los venezolanos se cagaban de risa al vernos llenar nuestras lanchas con esas bolsas... El destino final de ese plástico era el vertedero municipal del pueblo de Morrocoy por lo que seguirían contaminando, pero por lo menos más lejos del coral que se moría a ojos vista.

    La misma mierda pasa en el Mediterráneo, sumada a los vertidos de los tanques, con el agravante de las medusas cuya reproducción descontrolada, insisto, es una grave amenaza a los recursos ictícolas y a la que nadie del público le da pelota.

    Me parece perfecto que se prohíban esas putas bolsas y que sean reemplazadas por las de yute o de papel que se pueden reciclar sin mayores costos ni problemas. Mi ideología liberal no me lleva al asesinato del ambiente sino a su protección para la mejor utilización de sus recursos para los seres humanos que, en definitiva, son los únicos racionales sobre la faz de la Tierra y, por tanto, son responsables de sus actos y de sus consecuencias.

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    1. Disiento. Lo que a mi entender hay que hacer es fomentar la cultura de la responsabilidad individual, no hacer una prohibicion sabana. De nada.

      Si llevamos al extremo la idea de prohibir las bolsas, despues prohibiremos los Big Macs (dado que llevan a la obesidad), ni hablar de los cigarrillos, y por que no la cerveza, porque hay muertes por embriaguez.

      El problema adicional con el medio ambiente en particular es que es totalmente subjetivo y "fuzzy", lo cual hace dificil la discusion. Por ejemplo, anda a decirles a los abrazadores de plazas que un arbol menos no mata a nadie.

      Es todo cuestion de grados y responsabilidad. Aun si queres proteger el medio ambiente, no se deberia prohibir todo lo que pueda llegar a atacarlo, sino castigar al que actua en contra del mismo (y esto, solo si estamos de acuerdo en preferir al medio ambiente por sobre el ser humano).

      Porrr lo menos, asi lo veo yo.

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    2. Acá no las prohibieron pero los negocios las limitaron voluntariamente. Uno de los resultados fue que la gente las dejó de utilizar para la basura y ahora utilizan bolsas de plástico hechas específicamente para la basura que duran mucho más.

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    3. Louis, y eso que en Canadá supuestamente la gente tiene mucha información sobre el cuidado del medio ambiente. Pero esos son los mismos boludos que no matan ardillas porque son animalitos; los que te miran con asco sino no comés sano (y si fumás ni hablemos) y que además odian los transgénicos. Estos no se dan cuenta como otros tantos boludos que si contaminás los ambientes (el suelo, el mar, los ríos, el aire) vas a afectar directamente el origen de la cadena alimentaria.

      ¿Cómo vamos a poder producir los alimentos que necesitamos los seres humanos si el mar y el suelo están contaminados? Los ecologistas fanáticos odian los transgénicos, pero sin ellos la humanidad se estaría muriendo aún más de hambre.

      Es un tema complicado y sobre el que hay que leer bastante para poder separar la paja ecologista sociata de la verdadera conciencia de la responsabilidad ambiental, sobre todo para los que tenemos hijos.

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    4. "si estamos de acuerdo en preferir al medio ambiente por sobre el ser humano",

      Massa, a veces puede no tratarse de preferir a un radical "verde" o no. La realidad es que el ser humano, libre y responable, no flota. Vive en esta tierra. Se alimenta de lo que produce. Cuando en el ejercicio de la propia libertad, perjudica el derecho de un tercero, alli estará el límite.

      Es complicado, pero tampoco podemos ser tan tercos, y por ser una bandera bastardeada y aprovechada por aquellos que buscan cualquier situación para controlar y decidir sobre la vida de su semejante, no preservar lo que nos alimenta.

      Una cosa es prohibir el glisofato, y cagarnos de hambre, y otra es procurar una rotación de cultivos.

      Toda posición radical conlleva una mirada sesgada. Nunca la verdad está en los extremos.

      Igualmente creo que la prohibición no es nunca la salida, debe buscarse siempre por el lado de los incentivos.

      Saludos, Martín.

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    5. Perdón, me olvidaba de lo verdaderamente importante...

      Que hermosa proporción entre esa cintura y esas tetas !!!

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    6. Martín: Lo hermoso entre esa cintura y esas tetas es, justamente, su desproporción.

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  3. También es una cuestión de saber organizarse en el reciclado. Que en Venezuela los plásticos anden flotando en el mar habla de una sociedad subdesarrollada y desaprensiva como todas las sudacas. No creo que se encuentren bolsas de plástico flotando por los lagos de Suiza.

    Gus VF

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    1. Mi estimado Gus VF, en el Mediterráneo navegan cruceros cargados de turistas de países desarrollados, barcos mercantes y petroleros de importantes compañías de países desarollados con banderas de conveniencia o no, así como cientos de cruceros y yates enormes de diversos bacanes europeos y árabes. La inmensa mayoría de esos barcos arrojan desperdicios plásticos (entre otros muchísimos como el lavado de tanques en alta mar) sin ninguna clase de problema ni conciencia.

      Agregale la fauna de dos patas de turistas supuestamente civilizados (como alemanes y nórdicos) en las playas mediterráneas que se cagan en todo en cuanto pisan costas españolas, italianas, griegas y ni hablar de las costas árabes. Las costas de la Côte d'Azur están más controladas por los franchutes que el resto, pero te garantizo que el Mediterráneo se ha vuelto un asco y está recontracontaminado (aunque no tanto como los ríos Danubio, Rhin o el Saar que, curiosamente, pasan por países superindustrializados).

      También ha contribuido a la contaminación el crecimiento urbanístico enloquecido de las costas españolas donde no se han exigido plantas de tratamiento de efluentes domiciliarios y donde los soreteductos de miles de departamentos desagüan al mar. Lee a Pérez Reverte para tener la visión de un tipo que es nauta en serio y verás cómo reputea a gobiernos, empresas inmobiliarias y pesqueras por la depredación y la desidia en el cuidado del mar.

      Me importa un comino las ganancias de un montón de hijos de puta que nos están reventando el medio ambiente ni tampoco anhelo que los hombres desaparezcan de la Tierra como les gustaría a los orates extremistas ambientalistas para que la disfruten los animales. Lo que quiero es que mis hijos y mis nietos puedan disfrutar del mar y de la tierra, alimentarse de sus productos con toda la tecnología que pueda incrementar su producción y riqueza pero sin matar a la gallina de los huevos de oro. No tenemos adónde ir que no sea la Tierra. Esto es una realidad tan evidente que me asombra que se discuta siquiera.

      Negar la existencia del problema ambiental es de necios porque se lo ve y se lo comprueba si uno sabe mirar alrededor (además de mirar minas o travas como le gusta a alguno), sobre todo los que vivimos en países más o menos desarrollados en Europa, en Asia o en EE.UU. y Canadá. Nadá un ratito en el Tíber o en el Rhin a ver si salís vivo. Sos boleta, tritrí, como si nadaras en el Riachuelo.

      La desertificación avanza claramente en el mundo entero, pero como lo dicen los inútiles de los organismos internacionales especializados que no sirven para nada (como dice Nicolás), en este blog muchos no lo creen. Yo lo he visto en África, Europa, Asia y América y en mi querido mar.

      Coincido que con el calentamiento global se ha montado un enorme bolazo, pero eso no significa negar lo evidente. Hay gravísimos problemas ambientales.

      Cada vez somos más gente y cada vez se reduce más el espacio libre y no contaminado para producir alimentos. La tecnología nos ha permitido incrementar la producción de alimentos como nunca antes en la historia humana y está muy bien que así sea, pero hay que tomar conciencia y no negar la evidencia comprobable sino emplearla para tomar medidas correctivas cuando todavía se puede reducir el impacto. Si no lo hacemos, a largo plazo imperarán dictaduras que repartan soylen verde y sin ninguna clase de libertad. Seguramente ya estaremos nosotros muertos
      y no lo veremos, pero sí lo padecerán mis descendientes.

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