Pido disculpas por el off-topic, pero tengo que sacarme la bronca de adentro. Y además agradezco el espacio.
Detesto la televisión y a los que aparecen en ella, pero a veces, como la radio, uno no tiene más remedio que escuchar o ver. Simplemente no podés pedirle al dueño de la casa que lo apague.
Hace unos minutos tuve que escuchar (sin más remedio, repito) al planificador Doctor Cormillot explicar como cada nuevo dia se agregan nuevos gordos a la población de Argentina. Como si alguien se dedicara a pesar a cada ciudadano.
La solución, darle a los chicos la opción y el acceso a pepinos, lechugas y demás comida "saludable" en los kioskos de las escuelas, por ejemplo.
Y ahora viene lo mejor... Cómo carajo hacemos para que el chico elija un repollo antes que un alfajor jorgito. Tranquilos, el doc tiene la solución, según sus propias palabras: SUBVENCIONANDO esos "productos verdes" y sobre todo, aplicando un IMPUESTO al resto, cosa de hacerlos difíciles de acceder.
Y aquí termina mi comentario, no podría sacar ninguna conclusión al respecto porque lo único que se me ocurre es un kilo de pepinos y el culo del doctor, no sé si me explico.
Lo entiendo Anónimo. La televisión es una máquina de propaganda barata y eficiente del Estado. Por un lado adoctrinan para la sumisión, como "Cormillorr", por el otro pudren el cerebro de la gente con mierda televisada, como Tinelli.
Si estas marchas se sostienen con el mismo espíritu hasta el día de las próximas elecciones, entonces podremos decir que han valido la pena, y mucho. Espero que así sea, que el “te esperamos en la calle” se transforme en un civil, efectivo y real “te esperamos en las urnas” (no me pregunten para votar a quién, porque ése es otro tema…)("EL" tema en realidad...).
Yo ya estoy lista. Estoy acumulando cotillón. Hace unos días me conseguí en un casamiento un par de panderetas que hacen mucho ruido y tienen lucecitas. Esas se las doy a los nenes, porque los pienso llevar conmigo.Vamos a encontrarnos allá con unos amigos, que también van con sus hijos. Voy a comprar unas empanadas para tener listas al llegar, porque al otro día hay que ir a laburar y al cole. No pienso faltar a ninguna convocatoria.
Pido disculpas por el off-topic, pero tengo que sacarme la bronca de adentro. Y además agradezco el espacio.
ReplyDeleteDetesto la televisión y a los que aparecen en ella, pero a veces, como la radio, uno no tiene más remedio que escuchar o ver. Simplemente no podés pedirle al dueño de la casa que lo apague.
Hace unos minutos tuve que escuchar (sin más remedio, repito) al planificador Doctor Cormillot explicar como cada nuevo dia se agregan nuevos gordos a la población de Argentina. Como si alguien se dedicara a pesar a cada ciudadano.
La solución, darle a los chicos la opción y el acceso a pepinos, lechugas y demás comida "saludable" en los kioskos de las escuelas, por ejemplo.
Y ahora viene lo mejor... Cómo carajo hacemos para que el chico elija un repollo antes que un alfajor jorgito. Tranquilos, el doc tiene la solución, según sus propias palabras: SUBVENCIONANDO esos "productos verdes" y sobre todo, aplicando un IMPUESTO al resto, cosa de hacerlos difíciles de acceder.
Y aquí termina mi comentario, no podría sacar ninguna conclusión al respecto porque lo único que se me ocurre es un kilo de pepinos y el culo del doctor, no sé si me explico.
Lo entiendo Anónimo. La televisión es una máquina de propaganda barata y eficiente del Estado. Por un lado adoctrinan para la sumisión, como "Cormillorr", por el otro pudren el cerebro de la gente con mierda televisada, como Tinelli.
DeleteSi estas marchas se sostienen con el mismo espíritu hasta el día de las próximas elecciones, entonces podremos decir que han valido la pena, y mucho. Espero que así sea, que el “te esperamos en la calle” se transforme en un civil, efectivo y real “te esperamos en las urnas” (no me pregunten para votar a quién, porque ése es otro tema…)("EL" tema en realidad...).
ReplyDeleteEs mi esperanza.
DeleteYo ya estoy lista. Estoy acumulando cotillón. Hace unos días me conseguí en un casamiento un par de panderetas que hacen mucho ruido y tienen lucecitas. Esas se las doy a los nenes, porque los pienso llevar conmigo.Vamos a encontrarnos allá con unos amigos, que también van con sus hijos. Voy a comprar unas empanadas para tener listas al llegar, porque al otro día hay que ir a laburar y al cole. No pienso faltar a ninguna convocatoria.
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